22 febrero 2006

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Desde hace varias semanas, me pasa por la cabeza la necesidad de dar información sobre la novela "El Código Da Vinci" y sus numerosos disparates. Su autor presume de documentación rigurosa y sin embargo el libro está plagado de errores inadmisibles en un trabajo escolar.

Sería una simpleza negar que la inclusión de el libro de un personaje que es monje numerario albino del Opus Dei y dedica sus mejores energías al asesinato me ha obligado a aclararme en lo relativo al contenido de un libro tan unánimemente aclamado como pésimo por la crítica, como espectacularmente brillante en ventas. Es decir: mis amigos me preguntan por ese libro, y más ahora que la arrolladora maquinaria del marketing de Hollywood ha comenzado a difundir que la versión cinematográfica está ahí a la vuelta de la esquina (sobre esto recuerdo ahora un buen chiste de una cabra que le pregunta a otra por el título de una cinta de vídeo que se está comiendo -Es "Lo que el viento se llevó, contesta la cabra comilona. -Y ¿qué tal? -Pues, la verdad, me gustó más la novela).

En mi blog El Opus Dei desde dentro he hablado alguna vez sobre la archifamosa novela de Dan Brown, incluso he puesto algún link a lugares donde se ha hablado del tema, a veces en la bella lengua de Shakespeare. Pensé que una solución podría ser hacer un elenco de enlaces útiles, o incluso de traducciones de textos en inglés, y colocarlos en un lugar visible de la portada de mi blog, o dedicar un serial al tema, o -como he hecho con algún otro tema y pienso hacer con más- dedicar a estas cuestiones un día a la semana o un día determinado del mes. Me di también un paseíto por la red para ver si había material de interés y he encontrado muchísimas referencias, demasiadas para colocarlas en una ventanita de mi otro blog, un lugar en el que por otra parte cabría bien alguna referencia al asunto, pero no tal vez algo tan voluminoso.

Total, que he decidido hacer un blog específico y aquí está. No sé si lo actualizaré al día, ni si seré capaz de mantener los dos mucho tiempo, ni si todo esto del blog me llevará a parafrasear vitalmente a Cervantes hasta convertirme en una sombra de mí mismo que pase las noches de claro en claro y los días de turbio en turbio. No sé. Tal vez lo sepa pronto, tal vez tarde. En todo caso, procuraré mantenerles informados.

En fin, no sé cuándo pondré el siguiente post, ni cuándo completaré la lista de links de la que he hablado, ni cuándo sacaré un rato para poner por aquí y por allá buenas features que hagan agradable la visita. Por hoy, pongo un ejemplo del tipo de link que deseo recopliar y difundir a través de este blog, se titula EL CÓDIGO DA VINCI O EL MONUMENTO A LA IGNORANCIA.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo me pregunto el porqué de que el Opus salte al escenario para defender el Honor de Jesús, la Iglesia, y el Opus mismo, ante las afrentas del Código... pero no diga una sóla palabra de otras afrentas similares a la Iglesia o sus instituciones.

Y yo mismo me respondo: el Opus y sus miembros no se esfuerzan en defender a la Iglesia: se defienden a sí mismos.

Si el monje albino de la novela fuera jesuita, pongo la mano en el fuego a que este blog no existiría, ni el Opus, los colegios de su entorno, las publicaciones de su entorno, ni la oficina de prensa de su entorno, se ubieran molestado en decir una sola palabra al respecto. Tampoco sus intelectuales hubieran escrito libros ni publicado artículos explicando los claros errores históricos, etc, etc.

Y si el albino hubiera sido dominico, neocatecumenal o legionario de Cristo, lo mismo hubiera sido: el Opus callado.

Sin embargo, como al Opus le pisan su callo, tiene la desfachatez de salir diciendo que lo que defiende primeramente es la Iglesia: si así fuera, cada año debería orquestar con LA MISMA FUERZA dos o tres campañas ante "afrentas" similares a las del código.

Enrique Muñiz dijo...

Bartolo dice muchas cosas. Gracias, Bartolo.
Incluso dice que yo no haría este blog si el sanguinario asesino del "best seller" que nos ocupa no fuera del Opus Dei.

Tengo un amigo al que le gusta decir que "si mi padre fuera mi tío yo sería primo hermano mío". Ciertamente, no sé lo que hubiera hecho yo si Dan Brown en vez de mentir diciendo que se ha documentado sobre el Opus Dei, lo hubiera hecho con otra institución de la Iglesia.
Tal vez Bartolo tenga razón. Tal vez no. Tal vez hubiera vendido menos libros. Tal vez no hubieran comenzado la propaganda de la película. Tal vez mis amigos no me hubieran preguntado por el libro. Tal vez ni me hubiera enterado de su existencia. Tal vez todo hubiera ocurrido sin que yo tuviera ADSL y no hubiera hecho el blog.

No creo que haya mucha gente que pueda decir que es sencillo hablar mal de la Iglesia y del Papa delante de un amigo del Opus Dei sin que éste muestre su disconformidad.

Anónimo dijo...

Tal vez si no se hubiera empezado este blog, Bartolo estaría sorpendido de que el Opus Dei no dijera nada al respecto. Lo lógico y lo razonable es lo que sucede. Retorcer los acontecimientos a base de suposiciones suele desembocar en catarsis de imprecisiones, por mucha buena voluntad que se ponga.

Hormiga dijo...

Estimado Miguel, me encantan tus dos blogs. Soy Chileno y sin ser miembro de la obra - solo soy un humilde cooperador - ya me he acostumbrado a estos ataques que, cuando son en persona suelen ser más suaves y cuado anónimos, más virulentos - de cobardes.

Por lo mismo te hago una pregunta: ¿Crees tu que valga la pena mantener un blog por el librillo de Dan Brown o sería mejor uno que comentaras alguno mejor?, por ejemplo, podrías comenzar con "Camino".